Titha Solange Holz Leiva


Titha Solange Holz Leiva nació en Valparaíso, el 2 de enero de 1970, es la hija de al medio de 3 hermanos. 

A los pocos días de nacida, muere su progenitor, por lo que a su madre le toca enfrentarse a la crianza de su segunda hija y el duelo de la pérdida de su compañero y padre de sus hijas. En un contexto lleno de sufrimiento y cambios estructurales en la familia nace Titha.

Vive junto a su madre, abuelos y hermanos sus primeros años en Cajilla, Región de Valparaíso, Chile. De acuerdo a lo que relata las personas cercanas a ella, dicen que tuvo una infancia feliz, llena de buenos recuerdos, sin embargo, ahora de adulta se da cuenta que sus memorias y huellas, algunas están teñida de negligencia en sus cuidados, soledad, búsqueda de atención y figuras de apoyo que pudieran cobijarla.

Ella reconoce como figura principal de cuidado y amor incondicional hacia ella, su tía por parte materna, ̈ ́mamá Nancy ̈ ́ como ella la llama, quien fue una presencia que siempre la acompañó y la tomó de la mano cuando la necesitaba, quien le brindó esperanzas cuando ya no las había, la que entrego amor y compañía cuando nadie estuvo, fue quien la maternó y entregó sus cuidados como madre.

Titha Solange Holz Leiva
Titha Solange Holz Leiva

Desde pequeña se tuvo que enfrentar a diferentes desafíos y se tuvo que obligar a vestir de valentía para afrontar lo que la vida le estaba presentando. Fue madre adolescente, donde le tocó maternar en soledad y con escasas redes de apoyo, sobrevivió y resistió a violencia intrafamiliar, persiguió sin fronteras lugares y espacios donde le otorgarán estabilidad y cuidados a sus hijos y hacia ella.

Le ha tocado enfrentar pérdidas de mujeres importantes en su vida, como la de su mamá Nancy, la que estuvo bañada de colores grises y mucho dolor, sin embargo, sabe que esa estrella brilla e ilumina su camino donde quiera que vaya, además de la pérdida de su hija Antonia, a quien pierde cuando la gestaba de 5 meses.

Hoy tiene un compañero que está a su altura, quien la valora como mujer, la reconoce como extraordinaria madre e inigualable compañera.

La relación que tenemos nosotras es de tía-sobrina, sin embargo, yo la significó tal como ella significa a su mamá Nancy, con la misma incondicionalidad y amor que tiene hacia sus hijos, con la palabra perfecta en el momento justo, quien te hace sentir importante y esperanzada cuando hay soledad, quien te hace sentir la estadía en esta vida más hermosa y con sentido, quien da vida y luz a muchos seres a su alrededor. La honro y agradezco su existencia y llevaré su legado de resistencia, lucha y alegría donde quiera que vaya. la amo con el alma!